Así el sol
Será que ya no son nuestras las cosas,
o que nunca lo fueron y teníamos
-como quien guarda fe o agua entre las manos-
una forma imprudente de vivir.
Un alfiler de sol puntea cada
milímetro de mundo como si evidenciara
la dimensión exacta de la pérdida.
Ayer sabíamos poco de nosotros,
teníamos el hambre y la memoria
como garantes de un dominio sobre
el infinito de todas las cosas.
Basta con seguir el paso del sol:
recorre nuestro cuerpo con la misma
dureza que recorre el matorral,
la arcilla blanca
o la hormiga en el borde de la piedra.
Quizás nuestra única propiedad fue
la obsesiva ilusión de tener y tenernos.
Javier Vicedo Alós
(Inédito)
Será que ya no son nuestras las cosas,
o que nunca lo fueron y teníamos
-como quien guarda fe o agua entre las manos-
una forma imprudente de vivir.
Un alfiler de sol puntea cada
milímetro de mundo como si evidenciara
la dimensión exacta de la pérdida.
Ayer sabíamos poco de nosotros,
teníamos el hambre y la memoria
como garantes de un dominio sobre
el infinito de todas las cosas.
Basta con seguir el paso del sol:
recorre nuestro cuerpo con la misma
dureza que recorre el matorral,
la arcilla blanca
o la hormiga en el borde de la piedra.
Quizás nuestra única propiedad fue
la obsesiva ilusión de tener y tenernos.
Javier Vicedo Alós
(Inédito)
Nació en España, Castellón en 1985.
Publicó "La última distancia" (Ed. Puerta del Mar,2010) y "El azul silencio del hombre" (Ed. Aula de Poesía, 2008).
Publicó "La última distancia" (Ed. Puerta del Mar,2010) y "El azul silencio del hombre" (Ed. Aula de Poesía, 2008).
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