miércoles, 10 de octubre de 2012

Amalia Pérez























DOCE


Las valijas de irse
las arrugas de la ropa
la llave de luz falseada
la indecisión de despedirme de él
- seguro estará trabajando –
el vidrio de la ventana que nunca arreglé
las cicatrices que ya no importan
el botiquín atestado de frasquitos
el jazzero piano que nunca fue beetoven
lo poco a destiempo a rajatabla
los perdigones que no dieron en el blanco
los blancos que equivoqué
los vendavales que murieron como brisas
lo que negué
los sobreentendidos y los malos entendidos

la vida que se escurrió
boletas que no te voy a pasar




TRECE


El placer de temer a la muerte
la riqueza del tiempo acotado
la punzada de la despedida
el precipicio de la muerte ajena
la precipicio de la muerte mía
el azote de la conciencia
la virtud de las máscaras
la oportunidad de la soledad
la protección de la ignorancia
la fortuna de equivocarme
el vértigo de la libertad
la tensión de la distancia
la sabiduría de lo irreparable
la invención de la sonrisa
los cuchillos de la ironía
el drama de la obscenidad
la suprema belleza de la tragedia

¿qué de esto es tuyo?
entiendo
tu batalla por tener algo de mí




Amalia Pérez

De "Sapo que no se traga" (Monólogos) Ediciones El Mono Armado 2011
Argentina, nació en Lomas de Zamora.




2 comentarios:

Anónimo dijo...

que linda tu poesía Amalia, me encanta !

maqui dijo...

gracias!

Poesía del Mondongo

A todos, gracias por compartir este espacio

Email: fernando1954@gmail.com